En la
película “Cuando un hombre ama a una mujer” (USA 1994) se explica el
caso de un matrimonio maravilloso. Los dos se quieren muchísimo y parece
que vivan en un mundo muy divertido e irreal. El es un piloto de avión comercial,
lo cual supone que suele estar varios días seguidos fuera de casa, debido a las rutas que
tiene asignadas; ella trabaja en un colegio, y a la vez tiene que ocuparse de
sus hijos y del hogar familiar. Aparentemente es una descripción muy parecida a
la de otras familias, pero con un grave problema de fondo. A lo largo del film
vamos contemplando como ella, Alice, (Meg Rayan) tiene la afición peligrosa de la
ingesta de alcohol, que en principio su marido, Michael (Andy García) la tolera por no
desairar a su esposa. Pero la situación llegará a hacerse ¡insostenible. Vemos
el proceso de desintoxicación de Alice y el de la adaptación de ambos a los grupos de
terapia de alcohólicos anónimos. Pero realmente lo que mantiene el matrimonio
es el amor que Michael profesa a su esposa, a pesar de su comportamiento destructivo.
Es solo un ejemplo del drama que viven muchas familias ante una grave enfermedad y una lacra social
como lo es el alcoholismo. No obstante la película lo resuelve todo felizmente
demasiado rápido, pues en muchas ocasiones el cine nos quiere dar una esperanza
ensoñadora , incluso de situaciones dramáticas como estas.