¡Y yo que creía que llevaba tantos
años casada con mi marido! que al leer esta noticia que os adjunto me parece
que esté en medio del noviazgo.
La noticia dice que Ann y John Betar se
casaron hace ¡¡81!! Años. Parecía una locura de jóvenes pues ella solo tenía 17
años y él 21, y además se escaparon de casa, pues los padres de ella querían
otro matrimonio. Así que con este ejemplo tenemos una muestra más de cómo nos
equivocamos los padres muchas veces, y como un amor de juventud puede durar
toda la vida de la vida en la
tierra. Y aunque se escaparon, luego se casaron, tuvieron
cinco hijos y una larga prole.
Realmente este matrimonio es un
buen y un envidiable ejemplo, y podemos
pensar que seremos incapaces de hacer una hazaña así, pero cada uno en sus
circunstancias puede ser heroico y ejemplar, es cuestión de proponérselo sin desánimo.