En el continente americano, de
arriba a abajo, se está produciendo una efervescencia en la lucha intelectual y
de oración a favor del Matrimonio entre un hombre y una mujer, al considerar que
las uniones entre hombres, o las uniones entre mujeres no son matrimonio. Es
importante distinguir estos conceptos. No puede haber equiparación cuando no
existe nada que las ensamble. Las uniones entre personas del mismo sexo son en
sí mismas estériles, es decir por definición ambas mujeres entre no pueden
procrear, ni entre dos hombres tampoco. Este es un factor básico de distinción.

Así que ¡Muchas felicidades! a
Panamá (Centro América), porque en el nuevo Código de Derecho Internacional Privado de la
República de Panamá, ha rechazado la legalización del matrimonio gay.