12 febrero 2014

El escudo del amor

Ahora el amor al esposo en el matrimonio es un aspecto que va a resultar tan suficientemente fuerte que va a servir también para no reconocer comportamientos necios, o más aun, comportamientos ilegales o ilícitos.

Hasta la fecha esto se llamaba  “encubrimiento”, o, desde otro punto de vista y popularmente hablando, “Ojos que no ven, corazón que no siente”, es decir, despreocupación, mientras yo tenga las manos limpias. Sin embargo, llama la atención que el desbordamiento de amor que uno siente por el esposo no sirva para preguntarle cómo ha convertido el sueldo de miles de euros en millones de euros, pareciendo a los ojos de la enamorada esposa un mago tan extraordinario que en Las Vegas de América se convertiría en un espectáculo insustituible.

Como defensa esgrimida por los abogados de la Infanta Cristina, la encuentro patética, pues demuestra que es el único baluarte que existe en el ordenamiento jurídico español para defenderla, y debe ser así porque no hay por dónde coger el asunto para salir airoso. Es una defensa realmente penosa pues decir que confiabas en tu marido y que por ello no sabes ni contestas, es hasta tan ridículo como ingenioso. Pero, alerta! A partir de ahora se van a poner a la tarea todos los abogados de este país para defender a los estafadores casados, amparándose en que su defendido confiaba en el otro cónyuge, es decir, confiaban tanto que colaboraban en sus trapicheos, pero esto último no lo dirán. Vemos claro cómo acabará la inculpatória a la Infanta Cristina, y si la hija del rey del Reino de España resulta incólume, aumentará en este país el número de matrimonios, pues a partir de ahora para hacer negocios fraudulentos con buenos resultados, lo primero y necesario será casarse.

Si nos acercamos a la teoría triangular del amor, propuesta por el psicólogo estadounidense Robert Sternberg, el amor se caracteriza por la intimidad, la pasión y el compromiso: La intimidad, entendida como aquellos sentimientos dentro de una relación que promueven el acercamiento, el vínculo, la conexión y principalmente la autorrevelación.  La pasión, como estado de intenso deseo de unión con el otro. La decisión o compromiso, la decisión de amar a otra persona y el compromiso por mantener ese amor. Este componente implica mantener la relación en los buenos y en los malos momentos. Si además no estamos hablando ni de rosas ni de margaritas, ni de príncipes azules, en nada se asemeja esta teoría triangular del amor a lo que se pretende vender con la declaración amorosa de la Infanta Cristina en relación a su esposo, pues una cosa es el compromiso dado al momento de casarse y para toda la vida, para lo bueno y para lo malo, según también Sternberg, y otra muy diferente convertir el amor en un escudo infranqueable para mejor yo no enterarme de nada. Esto no es amor, entendido este como una relación interpersonal, ni tampoco es un matrimonio basado en la entrega y el compromiso, esto es una conveniencia inter partes de un contrato matrimonial con cláusulas particulares, pero que muy particulares.




10 febrero 2014

La ayuda de los santos

Hemos de poner profesionalismo, incluso para amar y entregarse. "La humildad es la verdad en el camino de la lucha ascética" es un punto de reflexión que a mi me impacta y que podemos leerlo al completo en la obra llamada Surco, en el punto 259, del conocido santo de la vida ordinaria, san Josemaria Escrivá. La verdad no es lo que yo quiero, sino lo que es realmente. Hay que tener sentido de la realidad. Y la verdad es que Dios existe y Dios nos ama. Ésta es la gran verdad de nuestra vida y que da sentido a todo lo demás” (Benedicto XVI, Madrid, 20 de agosto de 2011). Con ello llegará el momento en qué querremos estar tan cerca de Él que sentiremos la llamada universal a la santidad.

En nuestra vida cotidiana podemos ser santos, pero hemos de saber cómo hacerlo. No salen las cosas ni por qué sí, ni por suerte, ni por carambola, ni porque yo lo valgo… Salen porque nos empeñamos en serlos y porque es la voluntad de Dios. Así pues, los textos espirituales que nos han dejado los santos, nos pueden ayudar muchísimo en esa lucha diaria del amor y de la entrega a Dios, a la familia, especialmente al esposo en el caso de las casadas (o esposa en el caso de ellos), y al trabajo profesional y doméstico. El abanico de nuestro entorno es tan amplio que no nos lo acabaremos nunca.

En ese sentido, han llegado a mis manos unos documentos que recogen todo aquello que dejó escrito san Josemaria en sus diversas obras espirituales, y que un buen benefactor se ha dedicado a recopilar, sobre el tema del Matrimonio y la familia, que entraña mucha pero mucha humildad. Siempre es bueno recurrir al texto original, pero son referencias estupendas. Cada uno de nosotros tendrá su método y su tiempo de estudio, y a la vez su tiempo para hablar con Dios para poder llevarlo a la práctica, a la luz del Espíritu Santo. Después pondremos propósitos (pocos y posibles) para que nuestra periferia se empape de amor, sin exclusión de nadie, y podamos avanzar sin retrocesos.

Las obras que citamos en los documentos adjuntos son:

Conversaciones
Es Cristo que pasa
Forja
Surco


Aquí hay mucha tarea, pero poquito a poco sin perder la comba ni el tiempo, haremos nuestro camino de vida ascética y veremos que la verdad de nuestra vida y que da sentido a todo lo demás es que Dios nos ama.

Consejos a los matrimonios, san Josemaria Escrivá
El matrimonio, san Josemaria Escrivá
La familia, san Josemaria Escrivá

05 febrero 2014

La mujer histórica

Se dice de la mujer que cuando habla con su marido, estando enfadada, refiere el pasado de las discusiones conyugales hasta remontarse a la historia de los Reyes Godos, es decir, a la historia ordenada cronológicamente de treinta y tres reyes del reino visigodo entre los siglos V al VIII de España. 


Estas discusiones son realmente agotadoras para los dos. Él apenas tiene referencia de las discusiones más recientes, y ella demuestra que no ha perdonado ni ha olvidado nada o casi nada, cosa imprescindible en la convivencia matrimonial. Probablemente el contenido histórico de todas las referencias sea cierto, y debido a la portentosa capacidad memorífica que hace la mujer histórica, la referencia cronológica sea indudable. Sin embargo, como mujer creo que es mejor dejar el pasado donde se quedó y planteémonos en hacer limpieza. Pongamos esa parte de la memoria en la papelera, vaciándola materialmente, sin volver a deshacer la acción, recuperando el contenido o restableciéndolo aunque sea al disco duro, y vivamos a partir de hoy en paz, eso sí, disminuyendo la memoria histórica y aumentando las capacidades de diálogo y de escucha, pero sobre todo incrementando la capacidad de perdonar. La historia así se diluye y quedan a la vista y en nuestro corazón los actos de amor, ni más ni menos. 

04 febrero 2014

Madurez matrimonial

Presentamos en varios documentos un curso de 5 horas de amor matrimonial, “El matrimonio en la madurez. Está pensado en clave femenina, sin embargo, cuando lo escribí, no escribí nada que pudiera ser raro o extraño para un hombre que ya es esposo o que lo será en un futuro. Es un instrumento útil para dar charlas cuya materia central sea el matrimonio, pero pensado y dirigido a esposas con años de solera de vida conyugal, cuando los hijos, si los ha habido, han volado del hogar familiar, y te reencuentras con él, le miras de nuevo, y compruebas que habéis cambiado aun siendo los mismos. Habéis cambiado no solamente en dolencias o en el aumento de las arrugas, sino porque habéis amado. De ahí que tengamos que ponernos a amar más para poder seguir adelante hasta que la muerte nos separe.


Muy probablemente los documentos tengan defectos, o falten cosas, o sobre la mitad. Aquí está la labor, trabajar los textos. También pueden ser el gancho para iniciar unas sesiones mensuales con otros matrimonios y debatir los temas entre un picoteo agradable una tarde sábado. Y si me apuras, le propones al rector de la iglesia que frecuentas, iniciar unas charlas formativas. La formación ha de ser constante, también sobre el matrimonio, pues las rupturas matrimoniales se están produciendo a cualquier edad matrimonial y hay que tener conocimientos y elementos de lucha par a sacar adelante el mejor negocio que hemos tenido nunca, nuestro matrimonio, nuestra familia, esa que has creado, tu marido y tú, con la ayuda y la gracia de Dios.

Presentación del curso El Matrimonio en la madurez 1 IHE

Cimientos del Matrimonio. El Matrimonio en la madurez 2 IHE

Remedios y medios humanos. El Matrimonio en la madurez 3 IHE

El bien común de la sociedad. El Matrimonio en la madurez 4 IHE

31 enero 2014

Las promesas de decencia

El tema amoroso y sentimental del presidente de Francia se ha convertido en un problema de credibilidad política  y de reputación pública. Con anterioridad comentamos que las infidelidades de personajes de la vida pública no se quedan en el entorno privado, y que producen en los ciudadanos una decepción bastante notable. La historia de los personajes del Closergate ya la conocemos. Ahora el presidente se declara soltero, como si eso fuera una novedad. No obstante, los analistas consideran que estos trapillos tienen mayor trascendencia que en si mismos los propios devaneos y las idas y venidas.  Las consecuencias de todo ello las podemos leer en el artículo del conocido experto Rafael Navarro Valls, al que ya hemos citado en otras ocasiones, catedrático y académico secretario general de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación.


Por eso, se ha dicho siempre que es un gran bien dar buen ejemplo, aunque suene a tonadilla infantil del siglo pasado o de anteriores. Pero lo que es cierto es que nada de lo que hacemos es baladí respecto de nuestro entorno, tanto si somos un ciudadano corriente como un presidente. Si nuestra resonancia es pública, mayor aún son las consecuencias o las malas consecuencias. Y hemos visto que las ganancias de pescadores se las han llevado los editores del semanario descubridor del afer, los fabricantes de cascos de moto, las compañías de seguros que promocionan los coches con cristales oscuros para ofrecer mayor discreción, y las voces de los que pedimos más decencia y decoro en nuestros gobernantes, casados o no.

30 enero 2014

Una nueva cultura del Matrimonio

“Somos la generación del milenio que entienden que el matrimonio es una promesa duradera entre una mujer y un hombre. Es la relación humana única donde corporal, emocional y diferencias espirituales convergen para formar algo nuevo, a menudo conduce a la creación de la vida misma.
Lamentablemente, la cultura del matrimonio nuestra generación heredó fue erosionando mucho antes de que naciéramos. El matrimonio en Estados Unidos se ha vuelto cada vez más asociada con la satisfacción del deseo sexual, y la autorrealización de los adultos, más que el cumplimiento de un compromiso de por vida y el bienestar de los niños.
No debería ser ninguna sorpresa entonces que nuestra generación es tan ambivalente sobre el matrimonio. Nunca ha habido una generación de estadounidenses tan hambriento de matrimonios para emular o tan confundido acerca de lo que el matrimonio es en realidad. Conflicto de las afirmaciones de que el matrimonio es a la vez un obstáculo y una clave para nuestra felicidad ha llevado a un número cada vez mayor de jóvenes estadounidenses a declarar el matrimonio obsoleto, retrasar o renunciar el matrimonio, o abrazar las llamadas de redefinir el matrimonio por completo.
El matrimonio sigue siendo indispensable para la sociedad, y necesitamos el matrimonio, bien entendido, para hacer una reaparición.
Somos la generación del milenio que se mantienen comprometidos con el significado y el valor duradero de matrimonio. Ni los fallos de los tribunales, ni elecciones, ni presiones culturales nos disuadirán. Nuestra pasión es revivir una cultura del matrimonio, y dar forma a la manera en que nuestra generación piensa y habla de matrimonio.

Nuestros Cinco Principios

1. Prácticamente todas las civilizaciones a lo largo de la historia humana ha reconocido y defendido el matrimonio como la unión permanente, exclusiva y completa de un hombre y una mujer.
2. El matrimonio proporciona de forma única, tanto para la creación y el fomento de los niños.
3. El Estado tiene un interés apremiante en la defensa del significado y propósito del matrimonio porque el matrimonio es el comienzo de la familia, y la familia es el fundamento de la sociedad.
4. Afirmando el significado y el propósito del matrimonio a través de la ley es un paso importante y necesario, pero insuficiente. Como sociedad, debemos redoblar los esfuerzos para promover una cultura del matrimonio y la familia, para el bien común de todos los ciudadanos actuales y futuros.
5. Reconociendo la dignidad de cada ser humano y garantizar que reciban la protección integral de la lata ley y deben llevarse a cabo sin redefinir el significado y el propósito del matrimonio.
No somos indiferentes. Nosotros no renunciamos.
Somos la generación de Matrimonio.”
Este es el texto de la declaración que presenta esta nueva plataforma social nacida para cambiar la  cultura del Matrimonio: MARRIAGE GENERATION

Más información en:




28 enero 2014

La convivencia en el Matrimonio

La actividad parroquial siempre es misionera, está enfocada a temas siempre apostólicos. Y el apostolado del matrimonio y la familia cristianos es uno de ellos muy activo. Así en la Parroquia de la Inmaculada Concepción de Barcelona mi marido y yo participamos mensualmente en una misa ofrecida para el bien del matrimonio y la familia y después nos reunimos para recibir una charla formativa. En Esta ocasión leímos este decálogo para LA CONVIVENCIA de los cónyuges en el matrimonio, luego reflexionamos y expusimos cada uno el punto que nos parecía más clave de todos ellos.


Es muy buen ejercicio para que tú y tu esposa, o tú y tu esposo,  os sentéis a leerlo juntos, y luego  a hablar y a escucharos:

  1. Estar siempre dispuesto a dar y recibir amor. Lo que significa estar abierto a que la afectividad fluya entre ambos como una corriente de ida y vuelta. El amor es entregarse a la otra persona buscando lo mejor para ella.
  2. Tener muy en cuenta que lo importante es lo pequeño. Hay que cuidar los detalles, esos que hacen amable y llevadera la convivencia. Cuando se cuidan o descuidan esos detalles, esto se traduce en muchos y relevantes significados.
  3. Luchar por no ser tan hipersensible en la convivencia. Una persona muy susceptible puede llegar a convertir la convivencia en algo insoportable. El sentirse dolido por cuestiones de matiz es algo que hay que corregir antes de que la vida en común del matrimonio entre por unos derroteros negativos.
  4. Procurar evitar discusiones innecesarias. Rara vez de una fuerte discusión sale la luz. Suele servir más como desahogo y reprimenda. Las quejas, acusaciones y agresiones verbales dichas en un momento en que la cabeza deja espacio a la ira no se olvidan, marcan una huella y alimentan la lista de agravios.
  5. Tener capacidad de reacción tras momentos difíciles. Si no se ha podido evitar lo anterior, hay que reaccionar, de modo que no pasen horas o días sin hablarse, o haciéndolo desde una actitud crítica. Hay que buscar la aproximación, los acuerdos constructivos o pedir perdón.
  6. Cuidar el lenguaje verbal y no verbal, sabiendo que cualquier conducta humana es comunicación. Por eso atender muy especialmente a tres ingredientes esenciales de la comunicación: respeto, comprensión y delicadeza.
  7. Poner el máximo empeño para que no salga la lista de agravios. Recordar que la palabra es plata y el silencio es oro: en muchos casos lo mejor es callar.
  8. Tener el don de la oportunidad. Para plantear cuestiones más o menos conflictivas o tomar decisiones de cierta importancia hay que considerar cuál es el mejor momento y lugar. También básico tener un cierto orden en los temas a tratar y no pretender tocarlos todos al mismo tiempo.
  9. Todo comportamiento necesita de un cierto aprendizaje. Se llega a un matrimonio sólido tras repetidos esfuerzos por corregir lo que no va bien y añadir lo que falta. Es una ayuda mutua en un camino común.
  10. Para lograr una correcta estabilidad del matrimonio es necesario adquirir habilidades para la comunicación. Dejar hablar al otro; escucharle con atención hasta que termine; cuidar el volumen y tono de la voz; evitar justificaciones, acusaciones y descalificaciones; huir de la ironía y gestos despreciativos. No dar nada por sobreentendido y cuidar las interpretaciones erróneas de palabras, frases, gestos o actitudes. Evitar expresiones irreconciliables del tipo “No tolero”, “Es inadmisible”, “Que sea la última vez”, “Eres incorregible”, “No aguanto tu actitud” o “Siempre quieres llevar la razón”.

(Ideas extractadas del libro Remedios para el desamor de Enrique Rojas Montes)


Gracias!  Padre Miguel

  El último domingo del año, después de Navidad, la Iglesia lo dedica a la Sagrada Familia de Nazaret, como modelo a seguir por parte de las...